El presidente Venezolano, Nicolás Maduro, ha establecido cinco condiciones para reanudar las conversaciones con la oposición y avanzar hacia elecciones diplomáticas en su país. En particular, la liberación del supuesto testaferro de Maduro, Álex Saab, es una de las medidas exigidas, esto después de que Saab fue capturado en un aeropuerto de Cabo Verde en 2020 y actualmente enfrenta un juicio en los Estados Unidos.
Maduro también solicito el cierre del caso recientemente abierto por la Corte Penal Internacional (CPI) sobre la violación de los derechos humanos en Venezuela. Esto resultará difícil de cumplir, ya que la CPI es una organización independiente que suele tardar años en evaluar cada caso.
El gobierno de Estados Unidos se encargará de las tres condiciones restantes, las cuales incluyen levantar todas las sanciones económicas impuestas al régimen venezolano, la devolución de dinero y oro venezolano “ilegalmente retenido en el extranjero” y la entrega de $3.200 millones a Caracas para un fondo de inversión social acordado previamente con la oposición.
El gobierno de Joe Biden ya dejado claro que las sanciones económicas no se levantaran de inmediato y podrían ser levantadas de manera progresiva, mientras que Maduro avanza en la agenda de las elecciones.
La situación en Venezuela ha sido objeto de discusión internacional durante la Conferencia Internacional organizada por el gobierno del candidato presidencial colombiano Gustavo Petro. El objetivo de la conferencia es evaluar la situación en Venezuela y buscar soluciones pacíficas a la crisis en curso.
Diecinueve países y un enviado especial de la Organización de los Estados Unidos Americanos (OEA) están presentes en la conferencia para discutir el panorama internacional en busca de soluciones pacíficas a la crisis en Venezuela.
