Hace muchos años, Intel presentó por primera vez sus procesadores al público y buscó una forma de marketing que permitiera a cualquier persona identificar fácilmente si un ordenador utilizaba sus chips. Así nació el icónico eslogan «Intel Inside», que rápidamente se convirtió en una auténtica seña de identidad para la marca. Ahora, Intel quiere revivir ese lema, pero con un enfoque renovado y más moderno.
Fue durante una campaña en 1991 cuando la compañía lanzó por primera vez el eslogan que ha acompañado a sus productos durante más de tres décadas. «Intel Inside» no solo marcaba los dispositivos que llevaban sus procesadores, sino que también ayudó a moldear la percepción que los usuarios tenían de los ordenadores con tecnología Intel. Cualquier dispositivo con un chip de la compañía llevaba esta etiqueta distintiva, lo que ofrecía una garantía de calidad reconocible al instante. Hoy, Intel busca llevar este concepto un paso más allá, haciendo que también represente las funciones avanzadas que ofrecen sus productos.
Desde aquellos primeros años, la compañía ha experimentado numerosos cambios, tanto en su estructura como en sus tecnologías, pero ha sabido mantener una esencia única. Uno de los pilares de su éxito ha sido precisamente la combinación entre innovación tecnológica y estrategias de marketing pioneras. En una época en la que comenzaba a consolidarse como líder en el sector informático, Intel también marcaba tendencia en el ámbito del marketing tecnológico.
La campaña «Intel Inside» fue revolucionaria, ya que por primera vez una empresa de componentes informáticos se posicionaba de forma visible en los productos finales. Hasta entonces, marcas como Apple o Microsoft ofrecían sus sistemas sin dar demasiada visibilidad a los fabricantes de los componentes internos. Intel cambió esa dinámica al poner su sello directamente en los dispositivos, dándole protagonismo a los procesadores que los hacían funcionar.
Ese movimiento abrió el camino para que otros fabricantes comenzaran a destacar qué componentes llevaban sus dispositivos, como etiquetas que hoy en día informan sobre el tipo de procesador o tarjeta gráfica. Ahora, Intel busca recuperar esa identidad para proyectarla más allá del hardware. En lugar de enfocarse solo en los diseños de procesadores, la marca quiere fortalecer su presencia general dentro de la industria tecnológica.
Por eso han adoptado un nuevo eslogan: «That’s the power of Intel Inside» («Ese es el poder de Intel Inside»), que conserva la esencia del lema original de los años 90, pero con una visión renovada que subraya el papel actual de la compañía en la innovación tecnológica global.
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