Cientos de palestinos salieron este martes a las calles del norte de Gaza para exigir la expulsión de Hamas del enclave y el fin de la guerra con Israel, después de más de un año de enfrentamientos que han dejado la región devastada.
“Fuera, fuera, Hamas debe irse”, “Hamas terrorista” y “Detengamos la guerra” eran algunas de las consignas que coreaban los habitantes de Beit Haliya mientras marchaban con banderas blancas, pidiendo la salida del grupo y la liberación de los rehenes israelíes.
“La gente quiere libertad, el cese de los ataques contra Gaza, paz, el fin de esta guerra y la liberación de los prisioneros para poder seguir con vida”, expresó un manifestante. Otro agregó: “¡Queremos vivir! No queremos ser las próximas víctimas”.
En medio de la desesperación, un residente denunció: “Hamas nos dice que resistamos, pero ¿cómo hacerlo cuando estamos muriendo y sangrando? Hamas debe detener lo que está ocurriendo en Gaza… enviamos un mensaje al mundo: rechazamos el gobierno de Hamas”.
Los manifestantes buscaban distanciarse del conflicto y mostrar a la comunidad internacional que “somos un pueblo de paz”. Sus prioridades, aseguraban, son lograr “una paz segura para esta ciudad” y no continuar viviendo “bajo el acero y el fuego”.
“Seremos nosotros quienes decidamos quién gobierna esta ciudad… decimos sí a la paz y no a un régimen tirano que amenaza el futuro de nuestro pueblo”, insistió otro grupo de manifestantes.
Además, los participantes protestaron contra la prensa, en particular contra la cadena Al-Jazeera, acusándola de servir a los intereses de Hamas y de no mostrar la realidad de lo que ocurre en Gaza. “¿Dónde está la prensa? Exigimos que informen sobre estos hechos”, gritaban, mientras denunciaban que muchos reporteros se refugiaron en el hospital de Indonesia para evitar documentar la protesta.
A pesar del temor a represalias, la manifestación tuvo lugar sin que se reportaran detenciones por parte de Hamas.
En respuesta, el movimiento Fatah, que forma parte de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), instó a Hamas a “escuchar la voz del pueblo” y asumir las críticas por años de represión y abuso. En un comunicado, su portavoz pidió que se permita a la ANP “sanar las heridas de nuestro pueblo, reconstruir la Franja y frenar los intentos de desplazamiento y deportación”.
Mientras tanto, Israel reanudó sus ofensivas en Gaza tras el fracaso de las negociaciones para extender la tregua. “Actuaremos con una fuerza militar creciente”, afirmó el primer ministro Benjamin Netanyahu, mientras que el ministro de Defensa, Israel Katz, advirtió que los terroristas “pagarán un precio cada vez más alto” por negarse a liberar a los rehenes y prolongar el conflicto.
Como parte de su estrategia, el Ejército israelí ha reanudado las órdenes de evacuación en diversas zonas, incluyendo la ciudad de Jabailya en el norte de Gaza.
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