Mark Carney asumirá como primer ministro de Canadá este viernes, según informó el gobierno este miércoles. La ceremonia de juramentación se llevará a cabo en Rideau Hall, la residencia oficial, menos de una semana después de su elección como líder del Partido Liberal en reemplazo de Justin Trudeau, quien renunció en enero tras una década en el cargo.
Se espera que Carney anuncie rápidamente a su nuevo gabinete, ya que su administración operará de manera independiente a la saliente, a pesar de pertenecer al mismo partido.
Tras reunirse con el gabinete actual el lunes, Carney prometió una transición «rápida y fluida» y aseguró estar listo para enfrentar los desafíos de Canadá. Entre sus prioridades destacó la relación con Estados Unidos y la actual guerra comercial, subrayando su compromiso con el «respeto por la soberanía canadiense» y un «enfoque más integral del comercio».
«Mi gobierno garantizará que nuestra respuesta tenga un impacto máximo en Estados Unidos y un impacto mínimo en Canadá, mientras apoyamos a los trabajadores afectados. Mantendremos nuestros aranceles hasta que los estadounidenses demuestren respeto y asuman compromisos creíbles con el libre comercio», afirmó.
Carney fue elegido el domingo como sucesor de Trudeau con un amplio respaldo, obteniendo más del 85% de los votos. Sus competidores, Chrystia Freeland, Karina Gould y Frank Baylis, quedaron muy atrás con el 8%, 3.2% y 3%, respectivamente.
Su liderazgo se extenderá hasta la convocatoria de elecciones generales, que según medios locales podrían realizarse en abril, ya sea por decisión del Ejecutivo o a través de una moción de confianza en el Parlamento.
Aunque es su primera incursión en la política, Carney ha estado estrechamente ligado al ámbito gubernamental como asesor económico y financiero de administraciones tanto conservadoras como liberales, además de haber sido gobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra.
Al asumir su nuevo rol, destacó su experiencia en la gestión de crisis y su capacidad de negociación. «No buscamos peleas, pero los canadienses siempre están preparados cuando alguien se quita los guantes», afirmó, y comparó la situación con el hockey, asegurando que «Canadá ganará» frente a Estados Unidos.
Desde la Casa Blanca han sido cautelosos durante la transición y adelantaron que cualquier negociación sobre los aranceles recientemente impuestos a bienes canadienses se postergará hasta que Carney asuma oficialmente.
«Queremos establecer un entendimiento, asegurarnos de conocernos mutuamente y, luego, negociar con todo Canadá. Obviamente, esperaremos a su nuevo primer ministro antes de comenzar las conversaciones», declaró el secretario de Comercio, Howard Lutnick, en una entrevista con Fox Business.
Leave a comment