Se sospecha que un grupo hackers vinculado al gobierno de Rusia ha llevado a cabo un ciberataque en el mes de enero, lo que a provocado el desbordamiento de un tanque en una instalación acuífera del estado de Texas.

Este ciberataque en la pequeña ciudad de Muleshoe, en el norte del estado de Texas, ha concedido con las medida defensivas de precaución que tomaron al menos otras dos ciudades en el norte del estado de Texas, luego de que se detectara actividad cibernética totalmente sospechosa en sus redes.

Las autoridades también comentaron que el ataque fue un raro caso en el que piratas informáticos utilizaron el acceso a equipos industriales totalmente sensibles para que se interrumpiera las operaciones regulares en una instalación de agua de los Estados Unidos.

Esto ocurrió luego de que se realizara el ciberataque separado en el mes de noviembre del año pasado contra una planta de agua de Pensilvania que los funcionarios de los Estados Unidos atribuyeron a Irán.

Los incidentes cibernéticos en el estado de Texas también han ayudado a explicar una inusual advertencia pública que el asesor de seguridad nacional de los Estados Unidos, cuyo nombre es Jake Sullivan, ha hecho el mes pasado a los funcionarios estatales y a las autoridades del agua para reforzar sus defensa cibernéticas