La compañía Ford ha despedido aproximadamente 700 empleados que se encontraban construyendo la F-150 eléctrica, la cual es una de las versiones más vendidas, los despidos no tienen absolutamente nada que ver con la huelga en curso del sindicato United Auto Workers.
La empresa anunció el recorte temporal de uno de los tres turnos en su centro de coches eléctricos Rouge en Dearborn, ubicado en Michigan, cerca de la sede principal de la compañía, los despidos están alternados entre los tres turnos.
Ford ha cerrado durante un tiempo la planta para lograr mejorar su capacidad de producción, la empresa ha indicado que el último recorte que se realizó se encuentra relacionado como varias limitaciones, incluyendo la cadena de suministro y el proceso de procesamiento.
Otra de las limitaciones se encuentra relacionada como la entrega de vehículos que se mantuvieron retenidos para controles de calidad, luego de reiniciar la producción en el mes de agosto.
Las ventas han caído aproximadamente un 45% en el tercer trimestre en comparación con el año pasado, según ha informado la compañía, se espera que Ford aumente las ventas durante los últimos tres meses del año a medida que va aumentando la capacidad en la planta.