La exesposa del ejecutivo de Microsoft, Jared Bridegan, que supuestamente orquestó su asesinato durante años en el estado de Florida, fue detenida por las autoridades en el estado de Washington y se encuentra luchando por su libertad y su regreso al estado de Florida.
La mujer, llamada Shanna Gardner-Fernández, la cual puede ser condenada a muerte si se declara culpable, no piensa renunciar a la extradición durante su primera comparecencia ante el tribunal, a última hora del día viernes.
Según varios sitios de información jurídica en línea como EN Lawyers, un bufete de abogados defensores con sede en Maryland, la última curva en la sinuosa saga no es la norma para la mayoría de los casos penales relacionados con delitos violentos.
“Las solicitudes de extradición rara vez se niegan a rechazar o luchar contra la extradición interestatal, puede ser fructífero en circunstancias muy limitadas que a veces solo sirve para evitar que usted luche contra su caso subyacente” escribió EN Lawyers.
Gardner-Fernández supuestamente urdió la trama del asesinato con su marido Mario Fernández, que ahora es considerado “fugitivo de la justicia” y será detenido en el departamento correccional del condado de Benton ubicado en Washington sin ninguna fianza.
