Las autoridades alemanas llevaron a cabo una serie de operativos por las protestas que han realizado los miembros ecologistas de “Última Generación”, responsables de varias controvertidas operaciones de desobediencia civil, las cuales fueron criticadas por el jefe de gobierno, Olaf Scholz.

Se han registrado aproximadamente 15 lugares en el territorio alemán, donde se han cometido varias infracciones por parte del movimiento ambientalista “Última Generación”, a los que se les abrió una investigación contra siete de sus miembros.

Las personas que se encuentran siendo investigadas tienen un aproximado entre 22 a 38 años de edad, acusándoseles de realizar publicidad en redes sociales y organizar colectas de fondos por 1,4 millones de euros, con los cuales llevarían a cabo acciones ilegales.

Dos miembros del movimiento ambientalista “Última Generación” se les declara sospechosos de haber saboteado el Oleoducto Triesteingolstadt, en abril del año 2022, puesto que es considerada como una infraestructura crítica, según las autoridades de Alemania.

Los activistas ambientalistas han realizado plantones para pedir el cierre de varias instalaciones y también se han dado a conocer por las protestas en contra de minas de carbón y plantas de energía nuclear.