Este viernes, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, se reunió con su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, para ejercer presión sobre el acceso de su país a la OTAN, luego de que Estados Unidos le garantizó el envío de bombas racimo.
Esta munición que enviará Estados Unidos es prohibida en muchos países del mundo, pero no en Rusia ni en Ucrania, con la cual militares ucranianos buscarán recuperar territorios de su país, los cuales fueron conquistados por rusos, la guerra cumplirá el sábado 500 días.
El viernes el mandatario de ucraniano agradeció a Estados Unidos por el apoyo y dijo «es una ayuda militar indispensable, la cual llevará a mi país a buscar la paz«.
La reunión entre Zelenski y Erdogan, quien ha sido mediador entre Kiev y Moscú en este conflicto, será vista muy de cerca por el Kremlin, señaló el Gobierno ruso, quien ha tratado de quebrar el aislamiento al que le ha sometido Occidente, cultivando unas relaciones fuertes con el mandatario turco.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, comentó «seguiremos muy de cerca los resultados de estas conversaciones, ya que para nosotros es muy importante saber sobre qué temas hablaron«.
Se espera que en esta importante reunión el presidente Zelenski y el presidente turco Erdogan dialoguen sobre el acuerdo de exportación de cereales ucranianos, el cual expira este 17 de julio.
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