Shannon Phillips, directora gerente para Starbucks, de un centenar de locales repartidos entre Filadelfia, Delaware y partes de Maryland, Estados Unidos, quien fue despedida de su trabajo tras haber permanecido en él durante 6 años después de lograr un ascenso.
Todo ocurrió después de que dos jóvenes de color llegaron a uno de los locales ubicado en Filadelfia, para una reunión de negocios, sentados en la barra antes de ordenar uno de ellos, solicitó ir al baño, (para lo que se requiere un código de acceso), el cual fue negado y además les pidieron abandonar el local.
Ante la negativa de los clientes, uno de los empleados llamó a la policía, quien llegó y los arrestó, todo quedo grabado en de video a través de teléfonos móviles de personas que se encontraban en el lugar y que no dudaron en subir a las redes sociales, lo cual hizo que estas se viralizaran.
Esta situación comenzó a debatirse entre acusaciones de racismo y boicot a la prestigiosa cadena Estadounidense.
Mientras que las imágenes daban la vuelta al país, el director ejecutivo de la marca, ofreció disculpas públicas y condenó, el trato a los dos jóvenes, ordenó el cierre temporal de 8000 tiendas para capacitar a sus empleados sobre los prejuicios raciales y además decidió despedir a Phillips, su Directora gerente.
Según un jurado federal de Nueva Jersey, quién determinó que Starbucks violó los derechos civiles federales de la mujer, así como una ley que prohíbe la discriminación racial en el estado de New Jersey, y ha condenado a la cadena de cafeterías a indemnizar a su exempleada con 25,6 millones de dólares (25 millones por daños, 600.000 por perjuicios); sin embargo, la empresa negó que este despido se realizara por condiciones de raza.