Nuevas búsquedas policiales se llevan a cabo en el sur de Portugal en un intento resolver el misterio de la desaparición de Madeleine McCann, la niña británica que desapareció hace dieciséis años en el Algarve luso. A petición de las autoridades alemanas, la policía portuguesa está llevando a cabo un operativo en la presa de Arade, a unos 50 kilómetros de Praia da Luz, el lugar donde Madeleine fue secuestrada y que era frecuentado por el principal sospechoso, Christian Brueckner.
El 3 de mayo de 2007, cuando tenía tres años, Madeleine desapareció de la habitación de un complejo turístico, donde dormía junto a sus hermanos pequeños. A lo largo de los años, se han seguido diversas pistas de investigación, por lo que han surgido teorías y sospechosos, incluida la especulación sobre la posible implicación de sus propios padres.
Sin embargo, el caso dio un giro en 2020 cuando las autoridades identificaron a Christian Brueckner, un delincuente sexual alemán con un historial criminal extenso, como sospechoso de la desaparición. La Fiscalía alemana de Braunschweig trabaja con la teoría de que Madeleine murió a manos de Brueckner, quien ya había sido extraditado desde Portugal a Alemania en 2017 por un caso de abuso sexual a menores en Grecia.
La investigación reveló que Brueckner se encontraba cerca del complejo turístico donde se alojaban los McCann la noche en que Madeleine fue secuestrada, esto según los registros de su teléfono móvil. Estas nuevas búsquedas en la presa de Arade tienen como objetivo encontrar evidencias adicionales que puedan ayudar a resolver el caso y finalmente encontrar respuestas sobre la desaparición de Madeleine McCann.