El gobierno de Polonia ha confiscado el edificio del centro educativo de la embajada rusa en Varsovia, lo que ha desatado la indignación del gobierno Ruso, que ha calificado la acción como un «acto ilegal» y ha prometido una respuesta.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia ha señalado que la acción de Polonia es una violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961, un acuerdo internacional que regula las relaciones diplomáticas entre los Estados.
El embajador ruso en Varsovia, Sergéi Andreiev, ha calificado la incautación como un acto ilegal y ha afirmado que la escuela continuara sus actividades en otros locales de la misión diplomática rusa, garantizando un buen fin de año escolar para los niños y la organización de los exámenes.
El edificio, que ahora pertenece al ayuntamiento de la capital polaca, será utilizado para otros fines, esto según la información dada por las autoridades polacas. La incautación del edificio se hace en medio de las crecientes tensiones entre Rusia y varios países de la Unión Europea, incluyendo a Polonia.
Las relaciones entre ambos países se han deteriorado en los últimos años debido a la crisis de Ucrania y a la postura de Polonia frente a la migración.
Por su parte, el gobierno polaco ha defendido la incautación del edificio, argumentando que se trata de una medida legal y necesaria para garantizar la seguridad en la zona.
Este último incidente ha aumentado aún más la tensión entre Rusia y Polonia, lo que ha generado preocupación entre los expertos, que temen que la situación puede escalar aún más el futuro cercano.
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