La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha emitido una advertencia sobre los desafíos que enfrenta el BCE y otros bancos centrales debido a los cambios en la economía global causados por la situación geopolítica actual.

Lagarde afirmo que están siendo testigos de una “fragmentación” de la economía global en bloques que compiten entre sí, lo que puede tener implicaciones de gran alcance en la formulación de políticas monetarias por parte de los bancos centrales.

En un discurso en el Consejo de Relaciones Exteriores en Nueva York, Lagarde describió la posible inestabilidad en torno a las cadenas de suministro mundiales y la creciente “multipolaridad”. Los jefes de Finanzas han discutido sobre el papel de las luchas geopolíticas en la economía global, concluyendo que se necesita una mayor “resiliencia” de las cadenas de suministro para garantizar que estén mejor aisladas de riesgos, que podría disminuir el trabajo del BCE para reducir la inflación, pero si ajustan demasiado el crédito, pesará demasiado en el crecimiento.

Por otro lado, Lagarde cree que la reciente crisis entre algunos bancos regionales de Estados Unidos y el Credit Suisse no debería de implicar una rebaja de las tasas de interés por parte del BCE.

Lagarde en una entrevista con CNN dijo:

No tenemos que recortar las tasas. Ya veremos. Porque realmente tenemos que medir lo que saldrá de estos acontecimientos financieros recientes.

A pesar de los desafíos, Lagarde se mostró muy optimista sobre la economía global y afirmo que hay recuperaciones en marcha. Este es un punto que no era muy lógico hace seis meses, cuando todos esperaban una recesión, aunque solo sea como parte de una técnica.