La Corte Suprema de Estados Unidos ha mantenido el acceso a la píldora abortiva mifepristona este viernes, deteniendo así las restricciones impuestas al fármaco por un tribunal de apelaciones. Esta decisión supone mantener sin cambios el “statu quo” sobre el acceso a la medicación, al menos mientras el tribunal de apelaciones decide sobre la legalidad de la aprobación que los reguladores de Estados Unidos dieron al medicamento hace más de 20 años.
Este fallo supone la primera vez que la Corte Suprema se pronuncia en un caso relativo al aborto tras su controvertida decisión de eliminar la protección constitucional que tenían desde los años setenta, provocando asi “una avalancha” de restricciones en los estados gobernados por conservadores.
El presidente estadounidense, Joe Biden, celebró la decisión de la Corte Suprema, destacando que “la mifepristona sigue estando disponible y está aprobada para su uso seguro y efectivo mientras continuamos con la batalla en los tribunales“.
El fallo devuelve el caso al tribunal de apelaciones, que ha fijado la fecha para el comienzo de los argumentos orales para el próximo 17 de mayo.
En el centro de la disputa legal está la autorización sanitaria que la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) dio hace 23 años a la mifepristona. El juez federal de Texas Matthew Kacsmaryk, postulado por el expresidente Donald Trump, ordeno el 8 abril retirar la autorización sanitaria a la píldora abortiva.
La orden fue recurrida por el Gobierno de Joe Biden y un tribunal de apelaciones de Luisiana estipulo que el fármaco estuviese disponible solo hasta las primeras siete semanas de embarazo, tres semanas meses menos de lo que era antes y que el medicamento debe de ser recogido en persona, entre otras restricciones.