La pelea entre Israel y Palestina parece lejos de poder terminar, ya que en una nueva jordana de tensión el Ejército Israelí ha atacado a varios objetivos en la Franja de Gaza en respuesta al lanzamiento de proyectiles hacia su territorio.

Este nuevo aumento de violencia se debe a los enfrentamientos del miércoles entre policías Israelíes y los fieles Musulmanes en la explanada de las mezquitas de Jerusalén.

Además, el Líbano también se ha visto implicado en esta nueva ola de violencia, ya que han lanzado más de 30 cohetes hacia Israel desde su territorio.

Fuentes del Ministerio de Exteriores de Israel han informado de que este es el ataque de mayor magnitud desde la guerra liberada en 2006 entre Israel y Hizbulá.

Ante esta situación, el Primer Ministro Libanés, Najib Mikati, ha anunciado su oposición a que el territorio del país mediterráneo sea utilizado para generar operaciones contra la “estabilidad del país”.

Durante una reunión en Beirut con el ministro Italiano de Defensa, Guido Crosetto, Mikati ha rechazado cualquier escalada militar que amenace su territorio y ha asegurado que “todas las fuerzas activas en el sur del país han comunicado también al Gobierno su oposición al ataque, así como a cualquier escalada”.

Por su parte, el Ejército Israelí ha afirmado que ha atacado dos rutas de túneles de Hamás y dos sitios de producción de armas en Gaza. Sin embargo, hasta el momento, no se ha anunciado un ataque de represalia en territorio libanés.