El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha asegurado que su país es más seguro que Estados Unidos, a pesar del reciente secuestro de cuatro ciudadanos Estadounidenses en el país Mexicano.
Durante su habitual conferencia de presa, el presidente Mexicano respondió a las alertas de Washington para que los Estadounidenses eviten viajar o para que tomen precauciones en 30 de los 32 estados mexicanos, rechazando la idea de que el ejército de su país combata a los narcotraficantes donde quiera que se encuentren.
López Obrador recibió el pasado lunes a un grupo de congresistas Estadounidenses y al embajador de ese país en México, Ken Salazar, para explicarles sus esfuerzos contra el tráfico de Fentanilo y para abordar las controversias comerciales bilaterales.
En la reunión, López Obrador, explico que todo el «trabajo que ha venido haciendo México, principalmente sobre el tráfico de Fentanilo«.
La secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, y el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, también estuvieron presentes en el encuentro, donde se resaltó el esfuerzo «para mantener y ampliar» el comercio bilateral.
Esta reunión se dio poco después de que el pasado 3 de marzo, cuatro Estadounidenses fueron secuestrados en la ciudad fronteriza de Matamoros por presuntos narcotraficantes.
Dos de los Estadounidenses secuestrados murieron por parte de sus secuestradores, mientras que otro recibió una herida en la pierna. Según las autoridades mexicanas, las víctimas habrían querido cruzar a Matamoros porque una de ellas planeaba realizarse una cirugía estética.
A partir de este incidente, Washington recuerdo la vigencia de una alerta de viaje a Tamaulipas, cuyas carreteras han sido escenario de múltiples delitos graves en los últimos años.
Sin embargo, el presidente Mexicano sostiene firmemente que México es seguro y que no hay ningún problema para viajar por el país con seguridad.
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